Ser líder en el ámbito educativo no difiere mucho
de cualquier otro tipo de líder, el concepto en si ha evolucionado junto con
todo lo que constituye su entorno.
“Liderar hoy tanto en el ámbito personal como
empresarial u organizacional requiere del desarrollo de nuevas habilidades”
(Gonzalo 2016). En base a esta primicia podemos sustentar que el nuevo
siglo ha traído nuevos aires de liderazgos, personas que han aprendido de las
experiencias de aciertos y errores dejados por los pioneros líderes políticos,
empresarios, académicos, etc. Mientras tanto, es evidente la evolución de los
conocimientos que se van dando día a día gracias a las investigaciones
realizadas por personas expertas que coadyuvan con el desarrollo educativo, ya
que así como los tiempos van cambiando la forma de liderar también.
"Liderazgo centrado en apoyar, evaluar y
desarrollar la calidad docente se reconoce ampliamente como un componente
esencial del liderazgo eficaz" (Pont et al., 2008); cabe mencionar que
debe existir motivación en el personal docente y administrativo por parte de
los directivos para lograr en la organización educativa este tipo de liderazgo,
el cual hoy en día se está poniendo en práctica con el fin de mejorar el
proceso de enseñanza aprendizaje en los estudiantes, ya que de ellos depende
nuestro éxito o fracaso como institución.
A continuación se menciona las
siguientes diferencias entre el antiguo y actual liderazgo, mientras se señala
las semejanzas entre ambos.
Liderazgo Antiguo
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Liderazgo Actual
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Uso del poder de mando para
convertirse en figura.
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Usa su carisma y experticia.
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Ambicioso y competitivo en el
objetivos.
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Es trasparente en su identidad.
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Liderazgo egocéntrico de los
resultados de aprendizaje
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Mantiene un liderazgo abierto a
influencia creativas e innovadoras
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Semejanzas
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Llegar
al objetivo propuesto.
Existencia
de un líder para direccionar.
Atención
a la realidad presente.
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